Sólo por hoy

Y de pronto te sorprendes cuando un único encuentro inesperado vale más que 100 encuentros que alguna vez fueron motivados por una incesante búsqueda. Que un día puede ser vivido intensamente en horas y valer más que años en los que sentiste que flotabas dejandote llevar cual hoja al viento. Te das cuenta que alguna vez estuviste mal pensando que jamás encontrarías a a alguien que entendiera perfectamente tu mundo porque descubres a alguien cuyo mundo es también tu mundo, ves que en esta domesticación actual no se requiere que uno explique al otro su naturaleza porque son similares... sólo se va dando la domesticación de ir creando ritos y lazos.

Agradezco no haber apretado más el pañuelo aquella noche... y (aunque se acabe algún día todo) bien vale la pena vivir todo, comprendes que la vida se compone de momentos y que nada es imperecedero, que no hay que amargarse de perder a es a persona el día de mañana sino ser felíz porque alguna vez pudiste verte en sus ojos, reír como niña,  compartir y hacer de los silencios los momentos más ricos en información inaudible que va directo de tu corazón al suyo, disfruta cada día reconociéndolo como un hermano, como alguien tan cercano, un par, un espejo,  un alma que transita tan melancólico como tú, con los pies enraizados, brazos extendidos para volar lejos, los dedos listos para acariciar estrellas y sentir el viento secar lágrimas de felicidad durante el vuelo. El viaje es nuestro... ojalá podamos emprender ese vuelo añorado una noche de luna llena. Gracias mi buen amigo!